miércoles, 23 de febrero de 2011

Intrusa

Tengo el blog abandonado, no es por falta de ideas, ni por pereza. Es algo que me pasa a menudo con muchas cosas, basta que algo salga de mi rutina durante un tiempo para que me cueste horrores retomarlo. Me pasa incluso con los amigos, cuando llevo mucho tiempo sin hablar con alguno me cuesta retomar el contacto, luego me decido a hacerlo y es como si hubiéramos estado juntos el día anterior. Es una sensación extraña, siento como que pierdo el derecho a hacer cosas que en algún momento decidí dejar de hacer.
Mientras tanto, sigo leyendo blogs, pero casi no comento y me siento un poco como una intrusa, leyendo sin dejar rastro.

martes, 15 de febrero de 2011

Un día sin metro

Hoy, como todos los días después de dejar a los niños en el colegio, me he dirigido al metro para ir al trabajo, pero me he encontrado con la puerta del metro acordonada, así que me he acercado a otra entrada para encontrarme con más de lo mismo. A nadie se le ha ocurrido poner un cartelito para avisar que lo que pasaba era que había huelga. Ayer agredieron a un conductor de metro en esa misma estación y todos los conductores (incluidos los de autobús y tranvía) han decidido hacer huelga. Consecuencia: Bruselas colapsada esta mañana. Yo simplemente he dado media vuelta para volver a casa y trabajar desde aquí, pero la mayoría de la gente se las ha tenido que ingeniar para ir a trabajar andando, en autobuses de DeLijn, en taxi... Y lo mejor de todo es que la STIB (compañía de transporte de Bruselas) ha puesto en su sitio un modelo de justificante para que la gente que no ha conseguido ir a trabajar se lo imprima y pueda justificar su ausencia al trabajo. No se me ocurre qué empresas puedan pedir eso, como que la noticia no se ha oido bastante para que alguien necesite un justificante escrito, pero esto es Bélgica.
Lo de las agrsiones en el transporte público es algo que aquí se repite demasiado a menudo y los conductores no tienen otra forma de quejarse que haciendo huelga, precisamente hace unos diez días fue el turno de los conductores de tranvía, dos fueron agredidos el mismo día y al día siguiente la mitad de los tranvías no circuló por la mañana.
Lo curioso es que acabo de leer que en el incidente de ayer fue el conductor el que pegó primero, se sintió amenazado y simplemente pegó para defenderse. Me parece alarmante el hecho de llegar al punto de pegar antes de que nos peguen simplemente por si acaso, defenderse de qué si todavía no le habían hecho nada?
Yo siempre voy en el metro tranquila, pero creo que tendré que andar con más cuidado de ahora en adelante, la gente está demasiado a la defensiva.

sábado, 5 de febrero de 2011

Salud, dinero y amor

Creo que se me olvídó pedir lo primero de la lista el 31 de diciembre pasado.

Acabamos el año con M. recuperándose de la operación que salió bien, pero la pobre tardó en volver a la normalidad. Ahora todavía nos dice de vez en cuando que oye "pip" en un oido, pero parece que oye mejor que antes de la operación. Dentro de un par de meses toca revisión y esperemos que todo evolucione bien. De momento parece que vamos a tener que ir al logopeda porque pronuncia mal, no sabemos si por un problema de colocación de los dientes, por su mala audición o qué. Lo que sí sé es que parece que en Bruselas no hay suficientes logopedas, todos tienen demasiado trabajo.

O. por su parte se cayó por la calle el 5 de enero (culpa suya, no es capaz de ir andando normalmente por la calle y no escucha cuando le dices que pare. Algún día tenía que pasar) y se hizo un esguince horrible, acabó con la pierna escayolada, en principio por una semana, pero no sé cómo lo hizó, pero rompió la escayola y le pusieron una nueva y le mandaron que se la quedara una semana más. Decubrimos que andar con muletas no es tan divertido como parece (ni tan rápido) y de premio, al quitarle la escayola le quedó una cojera extraña. Al parecer tras dos semanas sin andar se le había olvidado así que ahora estamos yendo a rehabilitación para volver a aprender.

Yo empecé el año rompiendo un cristal de mis gafas y con una infección en los ojos, todavía no se sabe lo que pudo ser, quizá herpes. El caso es que un mes después mis ojos no están totalmente recuperados, pero bueno, poco a poco y con mucha paciencia.

Espero que el mes de febrero sea algo más tranquilo porque con tantas visitas a médicos, las bajas y la lentitud de las muletas el mes de enero se me ha pasado sin enterarme.