martes, 6 de diciembre de 2011

Saint Nicolas



Desde que tengo hijos la Navidad empieza para mí el 6 de diciembre. Ese día celebramos la llegada del santo. Aquí trajo Legos y figuritas de Playmobil, confiando siempre en los clásicos.
Este año ha sido algo especial porque O., que ya tiene ocho años y medio, llevaba unas semanas haciendo todo tipo de preguntas y comentarios sobre la venida de San Nicolás:
cómo viene, porque hay niños que no tienen regalos, los niños de mi clase dicen que San Nicolás son los padres… Yo me imaginaba que con su edad y los comentarios de sus compañeros de colegio el secreto no podría guardarse por mucho más tiempo y mi preocupación consistía sobre todo en que su hermana no sospechara nada, ella con cinco años tiene todavía algo de tiempo para hacerse preguntas.
Esta mañana al ver los regalos las preguntas han vuelto y se ha atrevido a decirme que se imaginaba que San Nicolás son los padres, pero no quería decirlo porque si se entera San Nicolás igual no le trae nada (así que en el fondo sigue esperando que San Nicolás exista J). Todo un soñador, mi niño.
M. por su parte lo que sí tiene claro es que los San Nicolás que se ven por la calle no son de verdad y el sábado después de «hablar» con un San Nicolás en un centro comercial me dijo al oído «¿Sabes? ese no es el San Nicolás de verdad». A ella también le han dicho los niños del colegio que San Nicolás no existe, pero parece que sigue creyendo.
Es una pena que niños mayores vengan a romper los sueños de los pequeños. Yo recuerdo que a mí también me dijo otro niño que los reyes eran los padres y a partir de ahí me empecé a fijar más en todo y al final acabé dándome cuenta muy a mi pesar.