He estado ocupadísima con el trabajo, y buscando uno nuevo, lo que me tuvo alejada de los blogs (lectura de los demás y actualización del mío) y después llegó la operación. Por fin saco un poco de tiempo para contar mi aventura con la sinusitis.
Traté de no pensar demasiado en lo que se me venía encima antes de que llegara la fecha, soy bastante aprehensiva y les doy demaasiadas vueltas a las cosas, pero ya unos días antes me di cuenta de que, a pesar de todo, estaba muerta de miedo. Empecé a sentir los nervios y varias cosas me confirmaron que realmente estaba estresada. Primero empecé a morderme las uñas de nuevo. Recuerdo morderme las uñas desde siempre. Mi madre intentó que dejaraese hábito y me echó todo tiempo de potingues en los dedos, sabían fatal, pero acababa acostumbrándome. He dejado de morderme las uñas muy pocas veces y siempre vuelvo a las andadas en momentos de estrés. En esta ocasión, unos tres días antes de la operación me di cuenta de que mis uñas "largas" ya no estaban.
Después empecé a comer sin control. Esto me suele pasar en periodos de nerviosismo. Como por pura ansiedad. Me encantaría ser una de esas personas que pierden el paetito cuando están nerviosas, a mí me pasa todo lo contrario.
Por último, el día antes de la operación, me di cuenta de que los nervios no me dejaban comportarme con normalidad con los niños, cualquier cosa que hicieran me enfadaba. Hasta ellos se dieron cuenta.
El día antes de la operación, al ver que no dormía mucho por la noche aproveché el tiempo para traducir, es un método buenísimo para no pensar en los problemas. Creo que dormí unas cinco horas. Además me di cuenta de que de tan nerviosa que estaba me quedé agarrotada y tenía tortícolis y dolor de espalda. Vamos, todo un poema.
Al final me presenté en el hospital a la hora tope para ingresar, a las cuatro. Al llegar me tocó responder cuestionarios varios, hablar con el anestesista... Y la tarde pasó rápido.
Como ya es habitual en mí hice todos los preparativos en el último minuto. Me llevé una maleta pequeña. En este último año y medio me he hecho una experta en preparar maletas en cinco minutos.
Se supone que me operaban al día siguiente a mediodía, pero al final bajé a quirófano a las tres y media (ya nerviosísima por la espera) y me subieron a la habitación a eso de las siete.
La operación fue bien, pero además de la sinusitis me tuvieron que operar del tabique que lo tenía desviado y de los cornetes que los tenía demasiado grandes.
La anestesia genial, ni me enteré cuando me dormí ni lo pasé mal al despertar y el post operatorio no es demasiado doloroso pero sí muy molesto. Al terminar la operación colocan unos algodones en las fosas nasales por lo que no se puede respirar por la nariz. Se acostumbra uno bastante rápido, pero para dormir por ejemplo, tenía la boca muy seca y me desperté unas cuantas veces asustada por mis propios ronquidos porque al tener que respirar por la boca es inevitable roncar.
El caso es que hoy era el gran día porque me iban a quitar los algodones. Me habían avisado de que era doloroso, pero me daba igual porque también me habían dicho que la sensación de poder respirar como es debido es genial. Lo que yo no sabía es que en mi caso, además de los algodones, tengo dos férulas de silicona para sujetar el tabique, así que sigo sin poder respirar!!! Además desde esta mañana me he sonado algo así como cien veces y sigo teniendo la sensación de tener los mocos de toda la vida acumulados ahí, siento hasta los ojos cargados. Un horror.
Ahora me toca tener más paciencia, hasta que me quiten las férulas la semana que viene. Sólo espero que la cosa sea como dicen, magia al sentir que puedo respirar perfectamente.
Por lo demás tenemos a los peques enfermos, los dos tienen fiebre, así que estamos algo aburridos en casa, ya sin ideas. Espero que se mejoren pronto y yo me sienta mejor y podamos aprovechar por lo menos algo de su semana de vacaciones.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
10 comentarios:
Poco a poco Ainhoa, ya verás que a los pocos días esa respiración que esperas llegará, lo malo es que la paciencia tiene muchos minutos acumulados, y segundos, y horas y días... en fin, que te sea leve querida.
Bueno espero que todo vaya bien y puedas volver a respirar tranquila... jeje mal chiste verdad...
Bueno mejoraros todo en general.
Yo paso un tanto espesita.
Saludosss
Uy, esa sensación de nervios que te deja el cuello y la espalda completamente agarrotados la conozco. Me alegro de que todo haya pasado y estés mejor. Ahora te toca tener paciencia y esperar una semanita :)
Ya me contarás, cuando acabe, cómo te sientes. Yo también tengo el tabique algo desviado :(
Muchos besos y ánimo para todos.
Hola! a mí me tocará hacerlo un día de estos (el otorrino del Parc Leopold me lo repite cada vez que voy, más a menudo de lo que debería). Así que a ver si nos das todos los datos para saber donde ir cuando me toque, en qué hospital, qué otorrino... ;-)
A mí tb me han hablado de lo que es poder respirar... espero que la magia te llegue prontito.
Besos.
Me alegro de que todo saliera bien. Los enanos se recuperarán en un tris ya lo verás, es la época. Muchos besos
Espero que poco a poco todo mejore.
Pues yo también me alegro mucho de que todo vaya mejorando.
Gora bihotzak eta beti aurrera, neska!
Muxutxuak!
Bueno, ya está hecho! De aquí en adelante todo es recuperación, aunque el comienzo sea lento lo peor ya pasó y al final notarás la diferencia... :)
ay cariño!!!! vaya operacion!!!! que impresion! yo me impresiono muy facil con todas esas cosas medicas!!!
Ojala que termines de recuperarte pronto y que puedas volver a respirar normalmente... ni puedo imaginarme como es esa sensacion!!!
Pues cuidate mucho y mejorate rapido... y los peques tambien....
Un abrazo fuerte para todos!
espero que una vez te quiten las férulas, puedas respirar perfectamente
buenos días, un beso
Publicar un comentario