No, no voy a
hablar aquí de mi blog, aunque bien podría porque lo tengo abandonadísimo y de
vez en cuando me entran remordimientos y me digo que no quiero cerrarlo así que
me paso y escribo algo, para no sentirme tan culpable. Algo así como un
servicio mínimo, no?
Aquí en Bélgica,
creo que no existen los servicios mínimos en el transporte público. Esto
significa que cualquier día puedes ir a por el metro, el autobús o el tren y
encontrarte con que sencillamente no hay porque no sé porqué, pero aquí les encantan
las « huelgas salvajes », esas que se hacen sin avisar, que no se
sabe cuánto van a durar…
Yo tengo la
suerte de que en esos casos doy media vuelta y me voy a trabajar a casa, es una
de las ventajas de tener un trabajo flexible.
Cuando hay huelgas
« planificadas » tampoco se respetan los servicios mínimos así que de
la misma manera puede que no haya ningún tren que te permita ir a tu trabajo, ningún
metro de tu línea… En ocasiones lo que sucede es que sólo parte del personal
secunda la huelga por lo que intentan dividir a los conductores de la mejor
manera posible para que las líneas más concurridas sigan con el servicio.
Llevamos ya desde
Semana Santa sin huelgas de metro, pero la última duró bastantes días, tanto
que la empresa de transporte decidió compensar a los usuarios que contaban con
abonos de transporte en el momento de la huelga. Así que el viernes recibí un
código para cambiarlo por un billete válido por tres días consecutivos.
Lo más curioso es
que la gente apenas se queja por el hecho de que de vez en cuando sea imposible
ir en tren a ciertos sitios, no funcionen los tranvías o una línea de metro o
tengan que ir en taxi al trabajo porque no existe ninguna otra opción válida. Únicamente
durante la última huelga se empezó a considerar la posibilidad de establecer la
obligatoriedad de los servicios mínimos en esos casos, pero no he vuelto a oír
a hablar de eso, habrá que esperar a la siguiente huelga importante.
6 comentarios:
Hola Ainoha,
¿No hay servicios mínimos allí? Bfff, entonces cuando hay huelgas debe de ser un auténtico caos...
Me gusta leerte, aunque no sea muy amenudo, no lo cierres, ven cuando tengas ganas. Un beso.
Sinceramente no me esperaba eso de Bélgica, aquí sí. Bueno tenemos la imagen de que fuera de nuestras fronteras todo es perfecto.
Yo si me quejo y eso que aquí a veces respetan los servicios mínimos y también nos compensaron, pero poco... jajaj
Saludos
Pues yo, como los belgas, no me voy a quejar de que tu blog (casi) no tenga servicios mínimos, porque me alegra q al menos sigas por ahí y vengas de vez en cuando. :)
Acá cuando se van a huelga creo que tampoco hay servicios mínimos, pero la gente sí que reclama. No sacan nada, pero reclaman.
(¿Puedes quitar lo de la verificación de caracteres? Llevo 3 intentos y no logro distinguirlos y publicar el comentario, espero lograrlo!)
Hmmm. Interesantes. El mundo ideal, quizás, sea ese de los servicios mínimos. Pero al menos en tema de huelgas, desde la perspectiva de un país tercermundista como el mío, sin duda sólo a partir de ese tipo de impactos (en donde se rompe realmente con la aparente normalidad) es que se logra cierta sensibilidad. Y eso en el mejor de los casos. Pero obviamente hay servicios mínimos que no pueden faltar: el agua, por ejemplo.
Qué bueno leerte otra vez.
;)
Aqui si hay servicios mínimos, pero en algunas huelgas, como la famosa del metro de Madrid de hace 2 años, no se respetan.
Me sorprende mucho la frialdad de los belgas. Aquí hay huelga y todo el mundo se enfada. Debe ser la cultura, el clima, no lo se ...
Besos!
Hola Ainkoa, como estás? nos conocimos en una quedada en bruselas allá por el año 2009.
perdona que te moleste, pero hace mucho que no sé nada de Aitor de 365 días en bruselas.
sabes algo de él? no le habrá pasado algo verdad?
espero que tu, tus hijos y tu marido esteis bien
un beso,
Publicar un comentario