martes, 30 de diciembre de 2008

A París en familia


Oihan feliz en París

O. llevaba tiempo diciendo que quería ir a París y que quería subir a la torre Eiffel, desde que vió Ratatouille, por qué será?. A él eso de París le sonaba de lo más exótico y lejano, así que X. decidió que teníamos que darle una sorpresa (de las que le gustan a él) y llevarle a París.
Salimos el viernes a eso de las 6 de la mañana de Bruselas y O. no se podía volver a dormir en el coche porque para mantener la sorpresa se nos ocurrió decirle que íbamos a un parque enorme con columpios y él iba pensando en los columpios y toboganes por los que se iba a tirar. Al final decidimos decirle que íbamos a París y casi que se llevó una decepción en el primer momento. Luego se lo pensó mejor y se quedó dormido hasta que llegamos.
El primer día visitamos Notre Dame, el Louvre para ver la pirámide de cristal (dejamos la visita del museo para la próxima vez), Tullerías, Place des Vosges, Pompidou y la fuente, la torre Eiffel y los Campos Elíseos iluminados. Anduvimos mucho y fuimos en Batobus. Todo genial, los niños se portaron de maravilla y O. encantado con haber podido subir a la TOrre Eiffel, M. disfruto menos, pero quedó encantada con las luces de Navidad. Hacía muchísimo frío, pero fuimos bien preparados, llevábamos más capas de ropa que si fuéramos a esquiar.
El segundo día fuimos a pasear por Montmartre y Saint Germain des Près. por la noche volvimos a Bruselas. Dos días muy concentrados, pero lo pasamos genial.
Aquí os dejo unas fotos. Mientras tanto voy a preparar todo para mañana, cenamos con dos parejas de amigos en casa.
Feliz último día del año y si no vuelvo por aquí Feliz 2009 a todos.

Todos en el batobus



Primer avistamiento de la torre Eiffel









PD: No tengo fotoshop y no conozco ningún otro programa para hacer esos cuadritos con muchas fotos pequeñas, ya lo siento.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Feliz navidad!!!

Siempre llega Nochebuena y no me hago a la idea, tarda mucho en llegar y a la vez siempre me pilla desprevenida.
Como siempre lo dejamos todo para última hora, faltan regalos... Pero todo irá bien.
Para este fin de semana hemos preparado una sopresa a O., creo que le va a encantar. Y M. nos acompañará.
Como anécdota os contaré que ayer quedé a comer con la madrina de M. y fuimos a un Quick (versión belga del McDonald's), más que nada porque hay juegos interiores y así podíamos hablar tranquilas un rato. O. se quitó el aparato de la boca y tuvo la brillante idea de metérselo en el bolsillo de la camisa. Fui a ver cómo iba todo y vi que no tenía el aparato, le pregunté que dónde estaba y me señaló el bolsillo y en ese intante vió que estaba vacío, se puso blanco. Después de un minuto de dudas "qué hago?", una madre me dijo que me quitara los zapatos y entrara en el pelotero a buscarlo y ahí que me fui. Menos mal que tuve una suerte tremenda y en un par de minutos tenía el aparato en la mano. Uffff!
Sí, esto no tiene mucho que ver con el título pero tenía que contarlo.
Bueno, feliz Navidad y a disfrutar de la buena compañía.

viernes, 19 de diciembre de 2008

Juego de niños

Hace muchos años daban en la tele un programa que se llamaba "Juego de niños" en el que los peques daban definiciones de cosas/personajes que les pedían. Yo siempre pensaba que era increíble la imaginación que tenían esos niños y resulta que ahora tengo uno así en casa.
Ayer O. y yo hablábamos sobre países y me decía que Rusia es un país muy grande donde hace mucho frío (los tópicos llegan todas partes, eh?) y luego me dijo que en Rusia hay muchos abetos pero están fuera y no les ponen guirnaldas. Claro, para él el abeto es un árbol de Navidad y creo que no ha visto todavía un bosque de abetos.
Esta mañana al ir al cole hemos visto la luna en el cielo y me ha preguntado "por qué está cortada? La habrá cortado con un cuchillo un hombre que ha estado en la luna?".
Estoy segura de que O. habría tenido mucho éxito en el programa.
Por lo demás hoy es teóricamente mi último día de trabajo del año. M. está enferma con fiebre "Maite est malat, elle a la fier" y se ha quedado en casa. Para colmo todavía no tengo todos los regalos y mañana tengo concierto de Navidad así que se avecina un fin de semana bien cargadito!!!

Buen fin de semana.

martes, 16 de diciembre de 2008

Grito, castigo, azote

Yo siempre había soñado con tener niños obedientes y juiciosos a los que se les explicaban las cosas a lo sumo un par de veces y obedecían. Pero esos niños existen realmente? O son sólo algo que se ve en las películas?
A mí me han salido niños rebeldes a los que me está costando educar mucho más de lo que yo me esperaba porque me plantan cara desde muy pequeños, desde que eran bebés me atrevería a decir.
O. pasó su etapa rebelde, la temible del no...y ahora tiene muy buenas intenciones, me dice a todo que sí, pero es un cabecita loca así que por un oído le entra y por otro le sale y es muy despistado así que acabo repitiéndole las cosas mil veces, pero ni aún así hay forma. Al final muchas veces acabo pegándole un grito y ahí reacciona y hace lo que le he pedido o lo que estaba haciendo y ha dejado de hacer porque se ha puesto a hacer otra cosa. Yo me pregunto por qué no reacciona cuando se lo digo de buenas y él me dice que porque cuando grito se asusta. Y por qué no me haces caso antes si te lo he dicho... y O. me contesta "sí, me lo has dicho muchas veces". Así que es consciente de las veces que se lo repito y de que después voy a pegarle un grito para que reaccione y que en ese momento va a hacerme caso, "por miedo a mi reacción? Qué tristeza. Él "se asusta" con el grito y yo pierdo un punto por haber utilizado un método que no me gusta. Pero a pesar de la mucha paciencia que le echo no he sido todavia capaz de encontrar la mirada o el tono adecado para decir las cosas una o dos veces y ya.
Lo de que hay que ponerse a la altura de los niños, explicarles todo bien e intentar hacerles entrar en razón lo tengo muy claro, en la teoría. Porque en la práctica se complica la cosa. Por ejemplo: cuando vamos a salir a la calle explico que hay que dar siempre la mano, no alejarse de mí y O., al que le encanta correr, no aguanta ni un minuto así. "Puedo correr?" me dice, y si veo que es un sitio seguro, le dejo con la condición de que pare cuando le digo "stop", tampoco quiero ser la madre que no deja hacer nada. Pues no es posible, al final tengo que gritar para que pare y no soltarle la mano para nada. Lo mismo si me acompañan a una tienda por ejemplo. La consigna es "no tocar nada", pero no son capaces, tengo que andar con mil ojos y acabar riñendo.
La cosa se complica cuando voy con los dos porque M. tiene que hacer todo lo que el hermano haga, aunque sea peligroso y yo me veo pidiendo a O. que dé ejemplo, lo que me parece algo cruel para un niño de cinco años.
M. ni siquiera tiene buena voluntad, a pesar de sus dos añitos, tiene actitudes muy "feas" como que cuando le riñes por algo, lo primero que dice es "es Oihan". Cuando ni siquiera sabía hablar señalaba a su hermano cuando hacía algo malo ella. Ahora está en plena fase de rebeldía y nos está probando, así que hace cosas como hacerse pis encima cuando le dices que ha hecho algo mal o intentas corregir su conducta (lleva sin pañal casi un año y desde entonces no ha tenido prácticamente "accidentes"). Las últimas rabietas fueron porque me cogió la cartera del bolso y quería jugar con ella, le dije que no, se puso a llorar y yo intenté que entrara en razón y nada, ella me dijo "pipi, pipi" como suele decir cuando le llevas la contraria (la mayoría de las veces lo dice a pesar de que ha ido al baño hace poco), le dije que no podía hacer pis, que acababa de hacer y... a pesar de todo se meó en el sofá de mi cuñada, así que la castigué para que pensara un poco en lo que acababa de hacer. Y ahí le dió la pataleta, así que se llevó un azote. Lo peor fue que después de eso vinieron otras pataletas por tonterías como que le tiré la peladura de una mandarina a la basura y cuando vi que se puso a llorar le expliqué que eso era caca, que no era la mandarina... pero nada, cuando ha decidido que le da por enfadarse, no hay quién la pare. Y yo lo intentó por las buenas y en lugar de escuchar una reacción positiva de su parte, grita todavía más y no calla hasta que la castigo mirando a la pared hasta que se calme o a veces cuando acabo dándole un cachete.
Desde mi experiencia como hija puedo decir que, desgraciadamente, yo era de las de M., muy rebelde y siempre llevando la contraria por fastidiar y la verdad es que había un método que usaban mucho conmigo: las amenazas, "si no haces esto te voy a castigar..." y en mi caso, los castigos casi nunca se cumplieron así que yo seguía en mis trece y seguí rebelde toda mi vida. Recuerdo un único castigo y me marcó. Con respecto al castigo físico sí que lo usaban conmigo, me he llevado bastantes azotes y con el tiempo vi que muchos los tenía merecidos porque de verdad muchas veces me portaba mal a propósito por el mero hecho de desafiar y mostrar mi carácter, pero en el momento en que me pegaban, de la rabia me ponía más histérica todavía. A veces me veo reflejada en el comportamiento de M. y no me gusta en absoluto.
De manera ideal me gustaría que todo fuera sobre ruedas y que nunca tuviera que recurrir a los gritos, los castigos y los azotes para educar a mis hijos, pero el momento todavía no ha llegado y me da pena no ser capaz de con una mirada, un gesto o una palabra dulce hacerles entrar en razón.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Qué frío!!!!

Tanto que O. me ha dicho cuando íbamos al cole "estoy congelado, como un salmón". Claro, alguna vez hemos comido salmón congelado en casa, de ahí su súper metáfora.
Llevamos ya como tres semanas rondando los 0 grados y tengo muuuuucho frío.

Simplemente genial: Stanislas

Hemos pasado dos horas geniales.



Se puede escuchar más en su sitio web:

http://stanislasmusic.artistes.universalmusic.fr/

miércoles, 10 de diciembre de 2008

La peque se hace grande


En agosto dejó el chupete. Demostrándonos su carácter, de vez en cuando le daba por tirar el chupete al suelo y se negaba a recogerlo, así que a la vuelta de las vacaciones, lo tiró en el avión y yo le expliqué que si no lo recogía se quedaría allí. Como yo lo había imaginado no lo recogió y cuando lo pidió en el coche le recordé lo que había pasado. Ella repetía "navión, tututte navión". Cuando fuimos a acostarla sin chupete se le hizo un poco difícil, pero ella misma decía "navión". Y adiós chupete, no volvió a pedirlo. Pero sigue tomando su bibe y todavía duerme en cuna aunque no por mucho tiempo, cambiaremos durante las vacaciones de Navidad probablemente.

Y lo más importante de todo, va al cole como una chica mayor, con su mochila al hombro y andando, no pide brazos a pesar de que hay un trecho desde casa. Lo mejor es que hoy no ha llorado cuando la he dejado en clase, me ha dicho adiós por la ventana y yo me he ido muy feliz y he llamado a X. para darle la gran noticia. Esperemos que dure y sea así siempre.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Siempre he soñado con tener una medalla


Estas fueron las palabras de O. al bajarse del podium. Hay que decir que tiene una medalla pero todos ganaron una, eh? No es el mejor judoka del mundo, hay que admitirlo, pero él está orgullosísimo con su medalla y se prepara para poder practicar atletismo el año que viene, porque la edad mínima para poder apuntarse es 6 años.

Y vino


San Nicolás hecho por O. Hay que fijarse en que tiene muuuuchos ojos (O. dice que siete) porque San Nicolás lo ve todo, por supuesto.

Sí, San Nicolás vino, y O. se llevó un pequeño disgusto al ver que a él sólo le había dejado una cosa al lado de la chimenea. Se puso a llorar y se preguntaba cómo era posible que San Nicolás le trajera más regalos a su hermanita que se porta peor. Pero San Nicolás había traído otro regalo, pero era tan grande que no cabía en el salón (bueno, caber cabía, pero luego no habríamos podido movernos demasiado), así que ahí nos fuimos los cuatro a la búsqueda del regalo perdido y lo encontramos!!! Un circuito de coches enorme que hace las delicias del llorón y del papá ;-). Qué penita que me dió y San Nicolás que quería darle una sorpresa... Y M. estuvo entretenida con sus nuevos juguetes y dando de comer a sus bebés, me extraña que no estén enfermos con una indigestión porque los pobres bebés se han pasado el fin de semana enchufados a los biberones.

viernes, 5 de diciembre de 2008

El cole

La adaptación al cole va mejor. M. empezó la primera semana muy contenta, creo que le gustaba eso de ser mayor y hacer lo mismo que su hermano. Además todo era nuevo para ella, pero creo que poco a poco se fue dando cuenta de que eso era definitivo y ya le gustó menos.
Una semana después de empezar a clase ocurrió la tragedia, se pasó todo el día llorando y no comió nada, su profesora y las cuidadoras estaban algo preocupadas. M. no participaba en clase, pero estaba atenta porque en casa cantaba canciones nuevas y nos contaba cosas que hacía en el colegio. Le preguntábamos qué le pasaba y ella nos contaba que un niño le había estirado el pelo y que habían castigado al niño por malo. Eso es algo que ocurrió el primer día de clase, pero ella lo contaba como si hubiera ocurrido hacía unas horas. O. nos contaba qué tal su hermana, si realmente lloraba o no. Él lo pasó bastante mal porque M. se pasaba el día pegada a él y ni siquiera le dejaba jugar con sus amigos. Al principio él estaba muy pendiente de ella, pero después de la novedad y al ver que ella no se le despegaba, le pedía que le dejara un poco en paz sin éxito. Así que tuvimos que hablar con los dos para que el problema no fuera a más.
Al final M. ha entendido que no puede estar todo el rato con O. y que él va a otra clase y no hay que llorar después de cada recreo. Y O. se sigue ocupando de su hermanita pero no la tiene todo el rato encima. Por otro lado parece que M. ya casi no llora en el cole, sólo cuando la dejo por las mañanas en su clase (los días que he ido antes y la he dejado en la guardería no ha llorado), hoy le he dicho "teatrera", estás haciendo teatro? y me ha contestado que sí. No creo que haya entendido mi pregunta, pero me he hecho gracia su respuesta y me he quedado más tranquila. Además, cuando voy a buscarla por la tarde se lo suele estar pasando tan bien que no quiere venir conmigo a la primera, sino que juega a esconderse, se queda hablando con otros niños, dando besos a las cuidadoras... Las profesoras y cuidadoras dicen que ya está casi integrada, que todo va mucho mejor. Espero que sigamos por el buen camino después de este pequeño retroceso en la segunda semana.

Venez, venez Saint Nicolas

Mañana es un gran día para los niños belgas. Viene San Nicolás con todos los regalos!!!
En Bélgica el 6 de diciembre se celebra San Nicolás. San Nicolás es en realidad San Nicolás de Bari que en algún momento se transformó en el Grand Saint como dicen por aquí. San Nicolás tiene un ayudante negro que en francés se llama Père Fouettard y van acompanados de un burro. Los niños dejan un zapato cerca de la chimenea el día cinco por la noche (además de una zanahoria y agua para el burro, que debe de estar agotado) y el día 6 por la mañana encuentran allí los regalos. En Bélgica es una fiesta infantil, se regalan juguetes y chucherías: sobre todo speculoos (galletitas de canela riquísimas) y nic nacs y... mandarinas. A los mayores, como mucho, nos regalan chocolate en el trabajo. Los niños cantan muchas canciones que tienen a San Nicolás como protagonista.
Esta tradición también es muy importante en Holanda (pero creo que allí pasa el día 5 y toda la familia se hace regalos), Luxemburgo, en el norte de Francia y creo que incluso se celebra en algunos lugares de Alemania y hasta en Polonia.
Por aquí O. está todo nervioso, lleva más de un mes cortando fotos en catálogos para preparar su carta. Fue dedicándose a esta difícil tarea cuando decidió que para hacerlo más llevadero no estaría mal cortarse el pelo. M. todavía no tiene muy claro como va esto de San Nicolás, pero seguro que también le cae algún regalo porque O. también eligió cositas para su hermana y las añadió en su carta.
A ver qué tal se porta el santo, de momento este fin de semana se presenta movidito, el sábado por la mañana en casa, luego O. participa en su primer torneo de judo, por la tarde a casa de los primos a intercambiar los regalos. Y el domingo a casa de la abuela y la bisabuela. San Nicolás pasa por todas las casas, así que el fin de semana que viene tocan padrinos/ madrinas... El cuento de nunca acabar, nuestra casa parecerá una tienda de juguetes la semana que viene. Y cuándo vamos a sacar un ratito para poner el árbol?

domingo, 30 de noviembre de 2008

Cosas que hay en Bruselas...


(y que antes sólo había visto en las películas)



- camiones de helados.





Son camionetas que en verano venden helados. Se colocan en sitios estratégicos como la entrada de los parques o la puerta de los colegios. Y cuando van por la calle llevan ponen una musiquita para que todo el mundo sepa que hay helados a la vista y los puedes parar para comprar uno. En invierno suelen vender gofres bien calentitos.



- "sopladores" de hojas


El ayuntamiento contrata en otoño a empleados empleados que se dedican a quitar las hojas de las aceras con máquinas que echan aire. Las dejan todas en un lado de la calle y luego las recogen.




- tranvías, muchos tranvías






- muchos parques y con paisajes variados


Algunos son verdaderos bosques, otros tienen lagos, otros tienen jardines de estilo inglés, los hay para todos los gustos


- una "playa" artificial en verano, al borde del canal.

- un mercado de navidad con una noria gigante y unas barracas de época para los niños






- vistas inesperadas dentro de la ciudad, cerquísma del centro

Después de ocho años, Bruselas no deja de sorprenderme.

He cogido algunas fotos de flickr, la del "carrito de los helados" de Stef, las del tram de chamberland y vytalizator.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Vamos a la cama que hay que descansar



El sueño. Qué fácil y tan complicado a la vez.


A mis hijos les hemos tenido que enseñar a dormir. Oihan de recién nacido no dormía nada, fue horrible hasta que cumplió los seis meses. Era imposible hacerle dormir, ni de día ni de noche. Se podía tirar horas llorando sin parar porque además ni siquiera los brazos le calmaban, y eso de tener un bebé llorando en brazos no es muy agradable. No le pasaba nada, pero lloraba muchísimo y era desesperante, incluso para los amigos que venían a visitarnos. No había nada que hacer, lloraba en brazos, paseando, en su cuna, en su hamaquita... Por supuesto tenía momentos en los que estaba bien después de haber recuperado con unos minutos de sueño, pero en cuanto se cansaba era incapaz de coger el sueño y nosotros muchas veces no éramos capaces de ayudarle a dormir. Así que no nos quedaba otro remedio que dejarle llorar e ir de vez en cuando a intentar calmarle. Con seis meses cogió el chupete y milagro!!! O. empezó a dormir bien.

Después vino la época en la que se despertaba pronto y teníamos que buscar formas de que se entretuviera él solo. Con dos años se levantaba a veces a las seis de la mañana y le decíamos que o se volvía a dormir o podía leer libros, pero nosotros no nos levantábamos. Nuestra habitación estaba el lado de la suya y oíamos lo que hacía a pesar de hacernos los dormidos. La mayoría de las veces cuando nosotros nos levantábamos más tarde nos lo encontrábamos así, creo que el aburrimiento podía con él.




Ahora O. duerme de maravilla, como un tronco, como dice él. No le despierta nada y nunca se levanta antes de las 7:30 - 8:00 los fines de semana. Se lo tenemos prohibido ;-)


Con Maite todo fue muy bien hasta los cinco meses, dormía de maravilla, aunque durante el día sus siestas nunca duraban más de 20 minutos o media hora. De repente la cosa cambió y era cada vez más difícil hacerle dormir. Lloraba para dormirse y se despertaba llorando por la mañana, además se despertaba muchas veces durante la noche y estábamos agotados. Un auténtico calvario para nosotros. Estuvimos pensando en llevarla al osteópata pero tampoco me apetecía empezar con médicos y lo fui dejando. Creo que el problema con M. fue que se acostumbró a dormirse en brazos y cuando se despertaba por la noche se sentía perdida, pero no encontrábamos la manera de que se durmiera ella sola en la cama. Finalmente con un año y medio la cosa empezó a mejorar.


En los dos casos hemos sido constantes y a pesar de que a veces al oirles llorar nos habría apetecido irnos con ellos a su cama o traerlos a la nuestra para que se calmaran hemos preferido seguir con nuestro plan para que tuvieran claro que cada uno duerme en su habitación y que tenían que acostumbrarse a eso. Las únicas excepciones han sido cuando han estado enfermos. M. todavía intenta "engañarnos" y nos pide que la saquemos de la cuna cuando llega la hora de dormir (sobre todo a mí porque sabe que yo soy más vulnerable), pero le explicamos todo bien y suele funcionar, aunque a veces tengo que enfadarme con ella si al día siguiente tiene cole y no quiere dormir. Sé que si le hago caso y la cojo, va a querer más brazos y no va a dormirse en su cama. Sin embargo, para las siestas, sí que a veces le dejamos que se duerma en brazos y suele acabar como en la foto.


No ha sido fácil pero creo que ha merecido la pena porque ahora duermen los dos la noche entera sin problemas y por las mañanas no se suelen despertar pronto. El único "truco" que usamos es ponerles música que ellos mismos eligen. Es muy importante que los niños duerman bien para que estén en forma todo el día.

A M. ya no le gusta el cole

M. fue encantada al cole la primera semana. Iba orgullosa con su mochila, no lloraba cuando la dejábamos en clase, venía contentísima y nos contaba todo lo que había hecho durante el día. Lo único que llevaba un poco peor eran las comidas (no comía demasiado en el cole) y la siesta (a M. nunca le he gustado dormir). Me parecía increíble que el cambio fuera tan bien, pero desgraciadamente la cosa ha cambiado.
Este martes, justo una semana después de haber empezado, nos dijeron que se había pasado el día llorando, no comió nada y no paraba de llamar a su hermano. O. y M. se ven en el patio y cuando las clases terminan a las 15:35 están juntos en la guardería. O. es sobreprotector con su hermanita y al parecer no se separa de ella. Le llevábamos una semana diciendo que ella ya es grande y puede hacer muchas cosas sola, pero no lo puede evitar, O. quiere ayudarla con todo y ella no se despega de él. Supongo que M. se ha dado cuenta de que O. hace su vida en el cole y no puede estar todo el rato con ella y de ahí su cambio de actitud. Lo curioso es que M. quiere ir al cole, quiere a su profe... pero no quiere estar sin nadie conocido allí. Normal, pero por qué este cambio después de una semana? A mí se me parte el corazón al verla llorando por la ventana. Espero que cambie pronto y vuelva todo a ser como la semana pasada.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Vamos al cole

Así van los hermanitos todas las mañanas al cole y así serán durante mucho tiempo nuestras mañanas.

NIEVA




viernes, 21 de noviembre de 2008

HARTA

- de este mes de noviembre lluvioso y gris que parece no tener fin.

- de pasarme las horas en la sala de espera de las consultas del hospital por culpa de las bronquitis, otitis, verrugas plantares, gripes y demás. A eso súmale las visitas al ortodoncista.

- de tener que repetir las cosas a mis hijos mil veces para que me hagan caso. No he encontrado la manera de decirlo una vez en el tono adecuado y ya, sé que es posible, así que no cejo en el empeño.

- de trabajar sola y no tener a nadie con quien charlar un ratito todos los días. Mi vida diaria se limita a cuatro personas + conexiones virtuales, pero quiero/necesito gente real con la que hablar todos los días!!

- de recurrir a la comida cuando las cosas no van bien. De no tener la voluntad de parar y elegir las opciones más sanas en lugar de comer guarradas. Ya no me vale la excusa "es más fácil"

- de dormirme en el sofá de cansancio y no poder dormir cuando me acuesto en la cama. De que suene el despertador todos los días demasiado pronto.

- de no saber qué hacer cuando pierdo el control, cuando las cosas me sobrepasan tardo demasiado en reaccionar y ya es tarde cuando quiero hacer algo para remediarlo.

- de ir al supermercado y ver que cada vez gasto más (lo que no significa que compre más)

- de la gente desagradable a la que le cuesta regalarte una sonrisa. Sonreir es gratis y nos hace bien a todos.

Y de otras muchas cosas de las que ahora no me acuerdo, pero que recordaré en cuanto haga clic en "Publish"

martes, 18 de noviembre de 2008

Primeras veces con los segundos

Ya está, Maite es una chica grande y ya va al cole. No ha llorado ni siquiera un poquito. Cuando me he dado la vuelta estaba contando a su profesora que había llevado los sandwiches en una caja (lunchera, como en España no se usan no tenemos nombre para eso) de Dora y quería ir a jugar con los demás. Nos ha dicho adiós por la ventana y ya!! Amatxu tampoco ha llorado ;-)
Hemos ido los cuatro al cole y M. estaba contenta, decía que iba "à l'école d'Oihan". Al llegar O. le ha preguntado si tenía que hacer pipi y la ha llevado a un baño que tiene un Mickey dibujado y claro, M. encantada. Después han estado jugando un rato con otros niños y O. se ha ido a su clase y M. a la suya. Hemos visto las camillas en las que echan la siesta y hemos dejado su mantita y su cojín para luego y hemos entrado en clase donde estaban todos los juguetes!!!
M. ya conocía el colegio porque vamos a buscar a O. juntas bastante a menudo, ya había visto a su profesora y el otro día pasamos una horita en la clase para que nos presentaran a sus "compis". Para ella no la dejábamos en un lugar desconocido y además en el patio va a ver a su hermanito.
He estado pensando lo diferente que es la sensación después de dejar a M. en el cole por primera vez si lo comparo con el primer día de colegio de O. Yo estaba mucho más nerviosa porque dejaba a mi hijo rodeado de gente que no conocía, en un colegio desconocido y sin saber lo que haría todo el día. Oihan lloró muchísimo al despedirnos por la ventana y a mí se me partió el corazón y, con lo llorona que soy, no pude evitar derramar alguna lagrimita (sin que O. me viera claro, era lo que le faltaba el pobre). Sin embargo hoy conozco el colegio, sé que si tiene algún problema su hermano estará cerca para ayudarle y O. me ha prometido vigilar que se come todo. Supongo que es la combinación de que conozco el colegio y que los dos hermanos se llevan pocos años de diferencia (menos de tres) lo que me permite estar más tranquila.
Esta sensación de tranquilidad con respecto a las primeras veces la tengo desde el embarazo. Ya conocía las sensaciones del embarazo de O. y me preocupaba menos si sentía algo "raro".
Con la primera enfermedad fue lo mismo. M. estuvo ingresada en el hospital por una bronquitis con 6 meses y no me puse tan nerviosa como la primera (y única) vez que tuvieron que ingresar a O. por un problema en la muñeca causado por un virus.
Primer día de guardería, igual, me quedé muy tranquila dejando a mi hija en manos de las tatas. Ya las conocía por cómo habían tratado a O. El último día de guardería ha sido otra cosa, ahí si que se me saltaban las lágrimas, a ellas también y M. nos miraba con cara rara.
No sé si soy la única madre que tiene esta sensación, pero yo me tomo todo con más tranquilidad con el segundo hijo. Supongo que si se llevaran más diferencia de edad habría sido para mí como volver a empezar cada vez, pero aquí todo se sigue y tengo todavía muy fresco el recuerdo del primer día de colegio de O. y no se parece en nada al primer día de M. Veremos qué nos cuenta la peque esta tarde.

domingo, 16 de noviembre de 2008

Googleando


Ayer muy aburrida se me ocurrió poner el nombre de mi abuela en Google y me apareció una foto en la que sale ella con otras muchas chicas cuando tenía entre diez y quince años.

Todavía le estoy dando vueltas a que se me tendría que haber ocurrido esto hace unos meses para habérsela enseñado y así me hubiera contado la historia de la foto. Ahora es demasiado tarde y ando con pena.

sábado, 15 de noviembre de 2008

NOWANN

Hoy he elegido un peluche de Maite para que lo lleve al cole para la siesta. Todos los niños tienen un doudou allí, así que he cogido uno que ella usaba de recién nacida al que ahora no le hace demasiado caso. Le he explicado para qué era y le he pedido que le ponga un nombre. Ella me ha dicho muy convencida "NOWANN" y yo me he quedado pensando porqué había elegido ese nombre. Después cuando le hemos dicho a O. cómo se llamaba el peluche O. ha dicho: "claro, como la canción" y ha empezado a cantar. M. enseguida le ha hecho coro.
Así que a M. le gusta tanto Alicia Keys que le pone a su muñeca el nombre de una de sus canciones. Sé que a mis hijos les encanta la música pero hoy me han sorprendido ;-)

viernes, 14 de noviembre de 2008

Fin de una etapa

El lunes es el último día de guardería para Maite. Cerramos así una etapa importante en su vida, pero también en la nuestra.
Hace unos cinco años estábamos un poco desesperados porque yo había vuelto a trabajar y no encontrábamos guardería para Oihan. Afortunadamente por aquel entonces X. trabajaba en casa así que podía ocuparse del peque mientras yo estaba fuera trabajando. Sin embargo teníamos que buscar una solución rápidamente. Ninguna de las guarderías que habíamos vistado nos convencía y, de todos modos, todas tenían lista de espera. En una de estas guarderías nos dijeron que justamente acaban de abrir otra cerca de nuestra casa y ahí nos fuimos. Visitamos la guarde y aunque las instalaciones no eran ninguna maravilla nos cautivó la simpatía de la dueña, Meriem, y las chicas parecían muy simpáticas también. A O. también le cayeron muy bien porque les sonrió enseguida. El caso es que como era una guarde que acababa de abrir tenía plazas libres y estaba al lado de casa, qué más podíamos pedir? Oihan empezó a ir allí todos los días un ratito hasta que al final fue a jornada completa. Allí recibió muchísimo amor, aprendió muchísimas cosas e hizo buenos amigos (todavía conserva uno de esos amigos que espero que le dure toda la vida). Cuando empezó al cole yo ya estaba embarazada de Maite y ni siquiera nos despedimos de las chicas, volvimos unos meses después. Cuando le tocó el turno a Maite me quedé muy tranquila dejando a Maite con las "tatas", a pesar de que Maite se negaba a beber el bibe, ellas se lo daban "a chupito" si era necesario o me llamaban para que fuera a darle el pecho cuando veían que era necesario, poco a poco M. cogió confianza y es allí donde ella está contenta, la guarde es su territorio y allí tiene a su amiguita Sarah (que además es hija de Meriem) a la que no para de dar besos.
Con las chicas de la guarde hemos vivido embarazos, rupturas, reconciliaciones, fallecimientos de seres queridos, hemos llorado y hemos reído. Hemos visto como los bebés que llegaban con tres meses iban creciendo y se convertían en personitas independientes. A mí me gustaba ir siempre con tiempo para que me contaran qué tal había ido el día, las travesuras de los enanos, las penas y alegrías de las chicas y yo también les contaba todo, aunque a veces ni siquiera necesitaba hablar, me lo veían en la cara.
Sé que ellas estarán siempre ahí y que podremos ir a vistarlas de vez en cuando, pero ya no será lo mismo. Maite es una chica grande y empieza a ir al colegio el martes, pero siempre recordaremos a las tatas que han mimado a M. y O. como si fueran sus propios hijos, que les daban cariño cuando lo necesitaban, que les hacían comiditas caseras riquísimas, que les regalaban cosas porque sí y que les daban chuches bastante a menudo (de hecho O. cuando vamos a buscar a M. suele decir "por favor, me das un caramelo?" y claro, siempre sale con algo). Aquí estoy como una tonta llorando pensando que mi peque se hace mayor pero también porque es una despedida.
Merci Meriem, Stéphanie, Samira et Naima

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Odio la informática

Cuando tuve la asignatura de informática por primera vez en el colegio la odiaba con toda mi alma. El profesor era horrible, sabría mucho de ordenadores, pero no tenía ni idea de dar clase y lo único que hacía era dar miedo a los alumnos que íbamos a la sala de informática como si fuésemos al paredón, temblando. Además el aula era tétrica . Yo no entendía nada de lo que me explicaban.
Más tarde, en mi año de Erasmus en Francia descubrí internet y me reconcilié con los ordenadores, me parecía increíble la de oportunidades que se abrían ante mí frente a una pantillita.
Mi relación con los ordenadores ha ido evolucionando con los años hasta el punto de que ahora forman parte de mi vida y no podría vivir sin ellos, sin embargo, todavía no he conseguido descrifrar los misterios que los rodean y soy feliz con un ordenador que funciona sin más, pero en cuanto empiezan a dar problemas, me veo en la clase de informática cuando tenía 15 años y me pongo a temblar.
Hacía ya mucho tiempo que no tenía problemas con estas maquinitas, había olvidado aquellos tiempos en los que perdía un trabajo o una traducción porque el ordenador simplemente se quedaba colgado, pero llevo algo más de una semana que sería mejor olvidar, y todo porque me había propuesto poder trabajar en las mejores condiciones desde casa si fuera necesario. Pero está visto que si un ordenador funciona no hay que molestarle porque se rebela. El caso es que hoy he vuelto a la oficina después de cinco días y mi ordenador ni siquiera se enciende, un virus, supongo, no recibo e-mails ("your mailbox is over quota", me encanta este mensaje) me he tenido que instalar en otro ordenador en el que no funcionan los programas que uso en el trabajo. Así que estoy de un genio!!! Qué pérdida de tiempo, ahora a borrar e-mails como una loca. Por qué estás cosas pasan siempre en el momento más inoportuno?

sábado, 8 de noviembre de 2008

Mis anillos?

Siempre llevo puestos tres anillos, sólo me los quito para fregar y algunas veces para hacer deporte. Ayer me los iba a poner para ir a París y no los encontré en la esquina de la encimera donde siempre los dejo al quitármelos para fregar. Se me pasó por la cabeza que Maite los podía haber cogido, pero no tenía tiempo para averiguarlo así que me fui sin anillos y mande un SMS a X. para ver si los había visto. Nada.
Por la noche, una vez que los niños estaban en la cama los busqué y encontré dos en un quemador de esencias, estaba claro que era obra de Maite. Últimamente le gusta sentarse en la encimera de la cocina mientras cocinamos, o preparamos algo y claro, lo tiene que tocar todo. Pero dónde estaba el tercer anillo? Ya había mirado en el tostador y en la cafetera, pero no lo veía por ninguna parte así que agité el tostador y... escuche un ruido sospechoso. El anillo estaba dentro!!! X. consiguió sacarlo después de agitar mucho el tostador y de terminar por empujarlo con un destornillador, estaba bien enganchado. Este pobre anillo está pasando por pruebas peligrosas, en un hotel en Canadá se me cayó por el desagüe del lavabo y tuvo que venir un fontanero a sacarlo. Me dijo que era algo que tenía que hacer a menudo así que parece que los anillos acaban en sitios raros, pero tanto como el tostador? Ideas de M., creo que no volveré a dejar los anilos al alcance de su mano.

PARIS


Notre Dame


Bateau mouche



Alguien sabe qué torre es esta? No recordaba haberla visto en ninguna de mis anteriores visitas a París.



Fontaine de St Michel






Entrada de metro

Misterio resuelto, estuve en París, una hora y veinte minutos en TGV. Viaje sin percances ni aventuras ;-)

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Oihan dice

Mientras cenábamos O. nos contaba algo que no conseguíamos entender, hablaba de de caballeros, pirámides, dibujos y cosas que habían pasado "antes de que hemos nacido". De repente a X. se le ocurrió que estaba hablando de una línea del tiempo y claro, hablaba de los egipcios y los caballeros en la Edad Media, todo eso ocurrió antes de que nacieramos. De ahí hemos pasado a contar quién nació antes y el propio O. ha dicho: "Yo nací antes que M." y le hemos preguntado si se acordaba de cuando M. no había nacido todavía, cuando no tenía hermanita y nos ha contestado muy serio "Oui, toutes ces années je les regarde dans ma tête" (sí, todos esos años los veo en mi cabeza). Claro, así funcionan los recuerdos en la cabeza de los peques, como imágenes que pasan ;-)

Mañana me voy de nuevo, espero sacar alguna foto porque el destino es una ciudad de ensueño, preciosa y que se deja fotografiar, pero pasaré allí sólo unas horas y vuelta a casa, aunque en diciembre me tocará volver con algo más de tiempo.

Cómo cambia la vida

Mis hijos tienen 5 y 2 años y hasta hace poco cada vez que salía y les dejaba "solos" no podía evitar sentirme culpable. Era un sentimiento extraño porque los peques se quedaban con su padre o algún familiar o buen amigo a lo sumo con una babysitter de confianza y no parecían echarme de menos, más bien yo diría que se alegraban del cambio, pero yo me sentía mal por dedicarme algo de tiempo a mí misma en lugar de pasarlo con ellos.

Esto me impedía disfrutar de las pocas salidas con amigos o con X. Lo peor era cuando por alguna razón me ausentaba y dejaba a los niños con su padre, me sentía culpable por dejar a X. solo con ellos y que tuviera que encargarse él de todo (siendo uno siempre es más pesado) y eso que a él le encanta cuando me voy y puede hacer cosas "especiales" con ellos. Por ejemplo, mientras yo estaba en Amsterdam subieron los tres al Atomium, cumpliendo así un sueño de O. que tenía muchísmias ganas de ver todo Bruselas desde ahí arriba.

Sin embargo desde hace un par de meses la cosa está cambiando y estoy volviendo a hacer cosas sola, me he apuntado a un coro que requiere algo de tiempo para ensayos, conciertos y demás, voy al gimnasio tres veces por semana e intento quedar con alguna amiga más a menudo. Además últimamente me ausento más de casa por trabajo. X. por su parte también tiene sus hobbies y cuando coincidimos llamamos a alguien para que nos cuide a los peques (cosa que pasa como muuuucho una vez al mes). El siguiente paso será dedicar más tiempo para nosotros como pareja, queremos escaparnos un fin de semana los dos juntos, pero encontrar a alguien que nos cuide a los dos niños varios días es muy difícil, así que seguiremos haciendo planes y esperando.

martes, 4 de noviembre de 2008

Vaga

Aquí estoy con mi nuevo ordenador leyendo blogs (por cierto, parece que hay una "plaga" de privatizaciones) con la tele puesta mientras el pobre X. trabaja en su despacho.
Tengo ganas de ir a dormir pero no me apetece ir sola a la cama así que me conecto a messenger y le pregunto si le falta mucho... los avances de la técnica. Además así evito hacer ruido y que la peque que todo lo oye se despierte.

domingo, 2 de noviembre de 2008

El viaje de vuelta

Me habéis pedido que os cuente la anécdota del viaje de vuelta, la verdad es que tampoco fue para tanto, una pequeña aventurilla, el viaje duró un poco más de lo esperado, tendría que haber llegado a Bruselas a las ocho y media y al final llegué a las diez.
Para empezar el tren venía llenísimo y nos tocó ir de pie, yo estaba deseando poder sentarme para poder acabar de leer mi libro, pero nada. De repente el tren dió un frenazo y dijeron por los altavoces que la gente que iba a Rotterdam podía bajarse y coger otro tren, los demás teníamos que esperar, pero no sabian decirnos cuánto tiempo ni qué había pasado. Así que ahí estuvimos parados durante casi una hora, sin luz en el vagón durante mucho rato. Con el aburrimiento se hacen muchas amistades y acabé hablando con tres húngaros (los que participaban en el desafío de Red Bull), una chica de Costa Rica que estaba de viaje por Europa y una señora francesa con sus dos hijas belgas. Los húngaros nos contaron su aventura, llevaban 6 días viajando por Europa sin dinero y con sus sonrisa, su buen humor y las latas de Red Bull habían dormido y comido gratis sin "casi" ningún problema, hasta los revisores de los trenes les dejaban montar gratis cuando les contaban la locura de su aventura. A mí me dieron mucha envidia porque es una de las pocas cosas que no hice de joven: viajar "a la aventura" y creo que ahora ya nunca haré. Sí que hice viajes con amigos, pero con itinerario más o menos organizado, con dinero en los bolsillos y en coche, así que no tiene demasiado mérito.
La chica de Costa Rica aprendió a ponerse una bufanda "a la belga" para no pasar frío y las chicas belgas pudieron practicar idiomas porque entre nosotros acabamos hablando en inglés, francés y español según a quién nos dirijiéramos. Al final hasta se nos unió una pareja de protugueses que no hablaban mucho francés e inglés y no sabían bien qué pasaba.
Lo que pasaba era que había un problema en un túnel y no podíamos pasar, pero nunca supimos si fue un accidente o simplemente una avería. Pero la aventura no acabó ahí, cuando pensábamos que el tren ya continuaba hasta Bruselas, nos dijeron que la última parada era Malinas y había que cambiar de tren, el revisor nos dijo "la aventura continúa", ja ja ja. Llegaríamos a la vía 1 y había que ir a la 10 en 3 minutos!!! Así que bajamos del tren y empezamos a correr por la estación, mucha gente con maletas, claro. Fue todo un show, porque el tren iba bastante lleno, seguro que hubo gente que perdió ese tren y tuvo que coger el siguiente. Por supuesto nos pasaron a un tren de cercanías que tenía más paradas e iba más lento y era bastante cutre, encima iba llenísimo y la mitad de la gente iba de pie. De repente dos policías entraron a nuestro vagón y empezaron a mirar todas las maletas que había, preguntando de quién eran... no sé qué buscaban, pero al parecer no era en nuestro vagón y siguieron su camino.
Al final llegué a Bruselas casi a las diez de la noche, el pobre X. estaba casi dormido esperándome. Para un día que estábamos solos sin niños!!! Pero bueno, seguro que recuerdo mi pequeña aventura siempre que viaje en tren. Tengo que decir que no me gusta viajar en tren porque siempre tengo miedo de pasarme la parada o de equivocarme de tren, no sé porqué, nunca me ha pasado.
Por lo demás hemos pasado un buen fin de semana, los enanos están de vuelta y hemos aprovechado muy bien el tiempo. Ya queda poco para el lunes...

viernes, 31 de octubre de 2008

Viajando con Red Bull

Voy a hacer publicidad de unos estudiantes húngaros que viajaban por Europa sin dinero, ni tarjetas de crédito ni móviles, sólo con latas de Red Bull en la mochila que intercambiaban por comida. Participaban en un concurso de Red Bull
http://www.redbullcanyoumakeit.com
y su equipo se llama Naked Metal Fans. Hoy llegaban a París para la fiesta final. Ya os contaré la historia de cómo les conocí, tuvimos un viaje de vuelta en tren movidito.

AMSTERDAM







Al fondo el mercado de flores






sin cortinas ni persianas

Los tulipanes para Lina


Parece que no era época de tulipanes, muchos bulbos, pero tulipanes de verdad nada, así que saqué fotos de todos los tulipanes que veía ;-) para que Lina no se quedara sin sus tulipanes






en un zueco


y por fin encontré unos de verdad

Ya llegan... las fotos

Estoy de vuelta en casita y sin niños (sólo un día), pero tengo el tiempo justo para poneros las fotos que esperábais. Bastante malas por cierto, pero bueno, sirven para hacerse una idea.




LAS BICIS


Para cinco

Para tres



Para 3 modelo cubierto


Y hasta floreadas... pero todas enormes


Voy a buscar mi bici para bajitas para ir al gimnasio

miércoles, 29 de octubre de 2008

LAS BICICLETAS SON PARA… LOS ALTOS

Como parte de mi visita a Amsterdam, para hacerla todavía más auténtica, decidí que sería una buena idea alquilar una bicicleta. Además tenían bicis en el hotel y después de una mañana lluviosa encerrada en la feria tenia la tarde libre, el cielo estaba azul y hasta brillaba el sol.
Siempre me ha fascinado ver a los holandeses de paseo en sus bicis, majestuosos, mirándolo todo desde lo alto.
En casa tengo una bici que uso de vez en cuando, así que estoy acostumbrada a andar en bici, pero las bicis holandesas me producen respeto y hasta ayer no sabía exactamente porqué.. Es verdad que la mayoría de las bicis en Holanda no tienen frenos « normales » sino que tienen retrofreno( si das pedales en sentido inverso,la bici frena), y yo nunca he conducido una bici con ese sistema, pero lo que en realidad me da pánico es la altura de las bicis, así que, para sentirme cómoda y no tener miedo de caerme tendría que elegir una bici de niño. Eso lo descubrí ayer. Al subirme a la bici que iba a alquilar e intentar pedalear, vi que no era capaz, el miedo a caerme me paralizaba. Así que me quedé sin bici, pero después me alegré porque un par de horas más tarde empezó a llover mucho. Ya sé que los holandeses andan en bici a pesar de la lluvia, yo también, pero prefiero no hacerlo en una ciudad desconocida.

La próxima vez que venga a Amsterdam me informaré sobre dónde puedo alquilar una bici de niño o a lo mejor me animo e intento alquilar una bici normal, grande para mí. He visto que ellos saltan de la bici cuando se paran en un semáforo, yo me limito a rozar el suelo con el pie, a lo mejor estudio la técnica y practico con la bici de mi marido.

lunes, 27 de octubre de 2008

Cortinas y persianas

Siempre me ha fascinado esta afición de las gentes del norte de Europa por mostrarnos sus casas. Aquí las persianas son casi inexistentes y las cortinas están más bien de adorno porque la mayoría del tiempo permanecen abiertas. Por lo tanto cuando uno se pasea de noche por ciudades como Bruselas o Amsterdam se siente dentro de una revista de decoración, paseándose por las diferentes páginas: moderno minimalista, estilo campestre, clásico rococó… hay para todos los gustos. Yo me siento un poco intimidada porque me parece que estoy tomando algo en el salón de alguien que ni siquiera conozco, pero a ellos no parece importarles, más bien diría que se sienten orgullosos de poder enseñarnos lo bonitos y acogedores que son sus hogares. La iluminación es más bien tenue, a menudo con velitas y todo es muy acogedor.
Esto contrasta mucho con lo que podemos ver en España siempre con las persianas bajadas en cuanto oscurece o hay mucho sol y las cortinas echadas, no vaya a ser que los vecinos nos vean. Aquí no importa que la gente vea el salón o incluso las habitaciones de tu casa, será que la gente no es tan cotilla y le da igual cómo tenga la casa el vecino? Desconozco la razón,puede que sea una búsqueda constante de luz natural que aquí es tan escasa, pero es cierto que después de ocho años me sigue sorprendiendo esta costumbre.

Viajando de nuevo

Viaje en tren internacional, me doy cuenta de que hemos cruzado la frontera porque todos los móviles empiezan a sonar, han recibido un mensaje de bienvenida. Si no llega a ser por eso, ni me habría enterado porque el paisaje continúa más o menos igual, aunque pronto empiezo a ver que cada vez hay más tráfico en la carretera, las casas están todas muy pegadas y las estaciones se siguen, cruzamos varias ciudades grandes. Además veo agua, mucha agua, en la tierra cayendo del cielo… Por fin aparecen algunos de los símbolos « típicos » del país : un molino, muchas bicis.
Llego a mis destino y me llevo una pequeña decepción porque no para de llover y todo está gris, no me apetece ir adescubrir la ciudad, de todos modos hoy no tengo mucho tiempo. Es increíble cómo el tiempo puede cambiar la primera impresión de una ciudad, si llegas a una ciudad soleada, con un cielo azul siempre es más agradable y te cuesta más ver los fallos. Espero que el tiempo mejore para poder sacar algunas fotos.
Hoy hace bueno, pero me pasaré todo el día metida en la feria, así que las fotos tendrán que esperar.

sábado, 25 de octubre de 2008

La tienda española

Hoy he tenido el primer concierto con el coro. No ha salido mal, pero yo me he dado cuenta de que tengo que estudiarme un poco más las letras porque había momentos en los que no daba una. Los enanos y X. han venido a verme con una amiga, pero O. tenia un cumpleaños (sí, después de menos de dos meses en el nuevo cole, ya empieza con sus compromisos sociales, ya ha hecho buenos amigos), así que se han perdido casi medio concierto.
El caso es que después del concierto, me he acordado de que cerca de allí hay un "comercio español" al que fui una vez a comprar lomo adobado para freir (las cosas que le apetecen a una cuando está lejos de casa), se lo he comentado a mi amiga y ahí hemos ido. Al verlo se nos han puesto a todos los dientes largos. Un montón de jamones colgados, todas las galletas de nuestra infancia (María, Chiquilín, Tostarrica...), todo tipo de embutidos y quesos de la tierra Idiazabal, manchego, cabrales...), todas las conservas imaginables, bacalao, callos... De todo había allí. el primero en picar ha sido X. "por qué no compramos esto, esto y esto?" y Oihan se ha quedado atontado mirando los jamones "cómo se comen?" y X. le ha contado que son para los ogros, que los cogen del techo y se lo comen a mordiscos. Creo que O. no había visto nunca jamones colgados (o no se había fijado) porque se lo ha creído todo.
Hemos salido de la tienda con un poquito de jamón, un poco de lomo, un trozo de queso, alguna lata... y lo mejor unos preñaos (o choripán)
No soy de las que echan demasiado de menos la comida española, cuando voy o cuando vienen a vernos siempre nos traen reservas, pero en ocho años que llevo aquí es la tercera vez que entro en una tienda de estas. La experiencia de hoy ha sido divertida porque me he sentido como una emigrante de las de hace 40 años que no probaban sus comidas en mucho tiempo y de vez en cuando necesitaban ir a tiendas de ese tipo para no olvidar el sabor de su país. Ahora todo es diferente, los medios de transporte son mejores y encontramos productos de nuestros países con más facilidad o nos los pueden enviar, así que no los echamos tanto de menos. Pero corroboro que nada sabe como en casa. Las cosas tienen gustos diferentes en cada país.
Mañana me voy de viaje de nuevo...

lunes, 20 de octubre de 2008

Historias de amor.

Aquí los "peluches de dormir" de los cuatro reunidos
Mickey y la muñequita de la izquierda son de Maite, el perro blanco de la derecha de Oihan, el perro marrón de la derecha es de Nathan y el otro perro y la jirafa de Basile.

Oihan duerme con su amigo doudou desde que tenía seis meses, casi cinco años más tarde el pobre doudou no tiene casi tela en las patas y ha perdido casi todo el relleno, pero sigue acompañando a Oihan todas las noches.
Maite se encariñó con Mickey (que era de su hermano, pero O. nunca le hizo caso) hace unos cuatro meses y desde entonces siempre duerme con él. La muñequita fue el primer doudou que le regalaron, se lo compró mi madre cuando supo que sería una niña. Cuando M. tenía meses, O. solía hacerle gracias con el doudou como si fuera una marioneta y a Maite ele encantaba.

Cuántos niños?

Este fin de semana, por algo inesperado, nos tocó pasar todo el día los dos solos con O., M. y sus dos primitos. Normalmente si sabemos que van a venir a casa preparamos algo especial para hacer, pero esta vez no sabíamos que vendrían así que fue improvisado y fue como si, por un día, tuviéramos cuatro hijos.
Llevo un tiempo preguntándome cómo será tener tres o cuatro hijos, es más difícil organizarse, seguro, pero en el día a día hay grandes diferencias? A mí me pareció fácil pasar de uno a dos, es verdad que luego hay que llevar a uno al cole y al otro a la guarde, que hay que poner más lavadoras, que cuando uno está enfermo hay que ocuparse también del otro y acabas más cansado, pero yo suelo decir que en realidad el segundo hijo sólo cuenta por medio en lo que a trabajo se refiere.
Hace poco conocí a una mamá de cuatro niños que me dijo que lo más duro es pasar de uno a dos, luego el resto viene solo. Pero no sé, no me convence, cuando el domingo íbamos al parque con los cuatro (1, 2, 4 y 5 años) me faltaban manos y aunque el parque estaba vacío había momentos en los que no veía a los cuatro o me llamaban varios a la vez o uno quería ir al tobogán, otro a los columpios, otro en bici y otro a jugar al balón y todos querían que les miráramos pero cada uno iba para un lado. Cuando volvíamos a casa X. comentó "te imaginas tener tres hijos?", justamente estaba pensando lo mismo. Qué locura!! pero luego pensé que realmente cuatro hijos "como los que tuvimos el domingo" es imposible porque entre O. y su primo mayor y M. y su primo pequeño se llevan sólo 11 meses, podrían ser hermanos, sí, pero sería casi imposible. Creo que cuando los hermanos se llevan dos o tres años los mayores se encargan un poco de los pequeños y todo se hace un poco más fácil.
Me auto convenzo y por otro lado me entran dudas, no sé si algún día nos animaremos a tener más hijos, pero es curiosa la experiencia aunque sólo sea por un día. Me encantan las familias numerosas, siempre me habría gustado tener mil hermanos, pero sólo tuve una y encima diez años menor que yo, por lo que casi nunca jugamos juntas por ejemplo. Y ahora me tienta la idea de tener más hijos, pero luego pienso con la cabeza y "mi cerebro me dice no" (es una frase que usa O. de vez en cuando últimamente, le habla su cerebro)

Peluquero a domicilio




Andaba yo pensando que tendré que llevar a Oihan a que le corten el pelo un día de estos, pero se me han adelantado.
O. empezó ayer a preparar su lista para San Nicolás.* Como no sabe escribir todavía le sugerí que podía cortar imágenes de los catálogos de las cosas que le gustaban y pegarlas en una hoja, así San Nicolás ve qué le gusta y elige algo de la lista. Ayer empezó y estaba tan emocionado que esta mañana antes de ir al cole ha seguido. Le he dado una tijera de niños, pero "de verdad", no una de plástico que corta sólo papel, pero no otros materiales.
Hemos ido al cole y me iba contando lo que había elegido... Todo normal hasta que ha llegado la hora de despedirme y le he acariciado el pelo y he notado algo raro. He mirado más detenidamente y... he visto que O. se había pegado un tajazo en el flequillo. La cuidadora se ha empezado a reir y O. sonreía. Yo no sabía si reirme o llorar, menos mal que el corte ha sido bastante discreto, pero se nota. Me he quedado tan chafada que ni le he echado la bronca, esta tarde le explicaré que la tijera no se usa para cortar el pelo. Menos mal que Maite no estaba cuando se le ha ocurrido la brillante idea porque seguro que le habría cortado el pelo a ella.
Yo había decidido confiar en él y darle ya tijeras "de mayor", pero creo que volveremos a las de plástico.


* Para los que no conozcáis esta tradición, en Bélgica (y otros países europeos) San Nicolás viene el 6 de diciembre a traer juguetes a los niños. Ya queda poco!






Actualización: Esta mañana he debido de mirar mal a O., sí que se le nota. He estado dando vueltas por el barrio buscando una peluquería abierta, pero el lunes es el día en el que la mayoría de las peluquerías cierran en Bélgica así que no ha habido suerte. He investigado y he encontrado las huellas del crimen (pelillos por el suelo). Oihan se ha subido a las escaleras y se ha mirado en un espejo de la entrada, todo ha sido absolutamente premeditado. Ahora dice que se encuentra raro al mirarse al espejo. Como prueba dos fotos:

AYER



HOY

lunes, 13 de octubre de 2008

El lobo


O. vistiéndose en su habitación, yo con M. en la cocina. De repente me doy cuenta de que O. no se está visitiendo sino que está jugando. Qué desarrollado tenemos el oído las madres para ciertas cosas, verdad?
A: O. deja de jugar con el globo y vístete
M.: Lobooooooo. Le loup est là. Buuuuuuuuuu.
Y M. empieza a llorar desconsoladamente.
Desde hace un tiempo M. tiene verdadero pánico por los lobos, será porque le he leído la historia de Caperucita o porque a su hermanito le gusta hacer "uuuuuuu, c'est le loup!!!" y hacer como que realmente viene el lobo? El caso es que tiene verdadero pavor y en cuanto oye una palabra, un ruido o algo que le recuerde al feroz animal sale corriendo a refugiarse en mis brazos. Le hemos explicado que no hay lobos en las casas, que los lobos sólo son malos en los libros de niños, pero nada. Recuerdo que O. también tenía miedo del lobo, pero nuestra explicación de que los lobos sólo se encuentran en los libros y los bosques le convenció y se le pasó en seguida.

Por fin!

Después de varios intentos fallidos pudimos encontrarnos con ella, ella y él. Pasamos una tarde magnífica al solito y con muy agradable compañía.
Las blogueras existen, son de carne y hueso y tan simpáticas en la realidad como parecen en su blog.
Merci Paula y familia. Queremos repetir pronto!!


update: Paula, te tomo prestadas la fotos, que yo sólo saqué una y era de los niños

jueves, 9 de octubre de 2008

Caducado

Esta mañana, mirando un racimo de uvas O. me ha dicho "amatxu, hay que comer pronto estas uvas, van a caducar". Eso me ha hecho pensar que no debemos de comer demasiados alimentos frescos para que O. piense eso.
Recuerdo que mi abuela iba a hacer la compra todos los días cuando yo era pequeña. Yo no tengo ni tiempo, ni ganas para hacerla todos los días. Uso muchísimos productos congelados, hago una compra grande cada diez días más o menos y voy a la frutería / supermercado si me hacen falta cosas puntualmente. Ni siquiera compramos pan todos los días, usamos mucho pan de molde por ejemplo.
La verdad es que creo que en Bélgica la cultura del supermercado está muy arraigada, por algo fue en este país donde se abrió el primer supermercado de Europa. Y claro en el súper lo encuentras ya casi todo embalado y etiquetado y con fechas de caducidad, hasta la fruta. Aquí no se encuentran demasiados comercios de alimentación pequeños como fruterías, carnicerías y pescaderías. Los que existen son más bien tipo "delicatessen" donde todo es bastante caro o son establecimientos en los que compran sobre todo algunas comunidades en concreto: turcos, marroquíes, polacos... y en los que encuentras también productos originarios de esos países. Por supuesto existen los "comercios españoles" pero creo que los he utilizado sólo tres veces desde que estoy aquí. Otra opción para adquirir los productos frescos serían los mercados que de esos sí que hay muchos por aquí, pero los horarios tampoco coinciden. Y los mercados dominicales ganas hay, pero al final me da una pereza enorme ir al mercado con los niños porque son de los que lo tienen que tocar todo y al final acabo un poco harta de tener que decir "no" tantas veces.
Espero que aunque no comamos tantos alimentos frescos los que comemos no tengan demasiados conservantes. Supongo que es la evolución en los hábitos de vida la que produce estos cambios en la forma de alimentarse.

martes, 7 de octubre de 2008

La nueva imagen de O.


Sí, desde hace ya una semana lleva aparato en los dientes. Es para adelantar los dientes de arriba porque tiene la barbilla salida. Él está encantado con su aparato rojo, no le molesta nada, pero es verdad que todavía está muy flojo y tenemos que ir abriéndolo poco a poco. Tendrá que llevarlo durante al menos nueve meses y esta es solo la primera fase...

Huelga

Empezamos la semana con una "jornada de acción". Los sindicatos hicieron un llamamiento para que los trabajadores se movilizaran para defender el poder adquisitivo. Al parecer la respuesta fue la esperada y los sindicatos están satisfechos con las acciones de los trabajadores.
Yo noté que los servicios públicos apenas funcionaban: no hubo recogida de basuras, ni correo, casi no hubo transporte público, casi todos los funcionarios se quedaron en casa... Pero en el sector privado los que consiguieron ir a trabajar sí lo hicieron. Había algunas tiendas cerradas, pero entre los pequeños comerciantes, casi todos abrieron. Yo pude ir al supermercado, pero me quedé en casa con M. porque no tuvo guardería. De todos modos habría tardado horas en llegar al trabajo.
Espero que la jornada haya dado sus frutos, al parecer ya han prometido nuevos presupuestos para paliar la disminución del poder adquisitivo así que la cosa va por buen camino.
Lo malo de estas jornadas es que participa el que puede y está respaldado, los que trabajan por su cuenta o trabajan o no ganan y al final salen perdiendo.
Me alegro de que haber paralizado el país haya servido para algo.

viernes, 3 de octubre de 2008

Amberes

Una ciudad preciosa, os la recomiendo.

Me encanta la torre de la catedral. Hay que fijarse en el cielo belga




La estatua que cuenta la leyenda del origen del nombre de Amberes (Antwerpen), Ant (hand) = Mano, Werpen = Lanzar.


Primer plano de la torre y el reloj


Y una curiosa, coche de caballos de dos pisos.


De nuevo viajando

Esta vez cerquita y sólo un día, pero es una ciudad preciosa.

Una nota sobre el nombre de la ciudad:
La leyenda cuenta que un gigante llamado Druoon Antigoon habitaba el río, cobrando un peaje a los barcos que quisieran pasar. Si un barco no pagaba, el gigante cortaba la mano del capitán y la arrojaba al río Schelde. Un día, un Centurión Romano, cansado ya, cortó la mano del gigante y también la lanzó. De ahí surge el nombre de ... dónde he estado?

En cuanto pueda os pongo un par de fotitos para daros envidia. Lo malo es que no ha parado de llover.

martes, 30 de septiembre de 2008

Frases de Oihan y amiguitos

Quería dejar constancia de algunas de las cosas graciosas que dice O. y empecé a apuntarlas de vez en cuando, aunque no soy muy constante voy a escribir un post para no olvidarme de nuestras risas y sonrisas

En el colegio de Oihan, hicieron una exposición sobre Matisse, después de visitar su museo y estos fueron algunos de los comentarios de Oihan y sus compañeros (traducidos, pero quedan graciosos igual)

Qué es una naturaleza muerta?
Cuando mi mamá pone un pescado encima de la mesa no se mueve, entonces, está muerto. Así que eso es una naturaleza muerta.
Matisse era un señor que pintaba muy bien, no se salía de la raya.

Y aquí algunas ocurrencias de Oihan

O: Qué es poder adquisitivo? (nota:después de oirlo en las noticias, por la radio, muy de actualidad, verdad?)
A: Poder adquisitivo es lo que podemos comprar con el dinero que tenemos.
O: Yo tengo la hucha llena de monedas (nota: de céntimo) así que tengo mucho poder adquisitivo.

O: Cuándo voy a tener otra hermanita?
A: ???
O: Quiero ver si nos sale más maja que esta.

Quiero ir a cortarme el pelo a la peluquería de Olivier Dachkin, es el mejor peluquero de toda Bruselas (nota: después de haber oído el anuncio por la radio. OD es una cadena de peluquerías, que hay por toda Bruselas)

Después de escuchar una canción que decía
"C'est l'ange qui nous quitte" le pregunté de qué hablaba la canción y me dijo "le monsieur portait de langes et puis plus; donc lange le quitte". Esta traducida no tiene tanta gracia pero confundió "l'ange" (el ángel) con "lange" (pañal) y como estaba en su época de dejar los pañales por la noche se pensó que la canción hablaba sobre un señor que llevaba pañales y luego el pañal lo abandona, porque ya no lleva más. Imaginación al poder, este es mi Oihan.

Y luego están sus palabras inventadas una de las últimas ha sido "avestruja" (avestruz).

Continuará...

lunes, 29 de septiembre de 2008

Cine

A mí me gusta ir al cine, pero por lo que tiene de socialización. Vas al cine con amigos, das una vuelta antes o después. No soy muy cinéfila y he de confesar que la mayoría de las veces me da lo mismo ver una peli en el cine o en mi casita tranquila. Claro, hay excepciones, pero en general es así.
Aquí viene el problema, al Sr. X le gusta ir al cine porque sí y además sólo ir al cine, ir y volver, sin ir a dar un paseo, ir a tomar algo... Puede irse al cine solo y todo. A veces dice que quiere irse al cine para romper con la rutina de la semana y a mí eso de llegar a casa y que me digan "vamos al cine", " a ver qué?" "no sé, ya habrá algo", me rompe los esquemas. Yo voy al cine a ver una peli que me apetece mucho y me gusta pensarme que voy a ver, imaginarme lo mucho que me va a gustar...
El viernes íbamos a quedarnos en casa a ver la tele y a X. se le ocurrió que sería genial ir al cine, llamó a la babysitter y ahí que nos fuimos. Yo le dije qué pelis quería ver y él eligió las suyas y hasta coincidíamos en una!!! El caso es que la babysitter se retrasó y llegamos tarde a la sesión así que tuvimos que ir a otro cine y claro, tuvimos que hacer tiempo porque la sesión empezaba más tarde. Yo había ganado, hubo algo más que cine, por una vez. Además vimos Faubourg 36 que me gustó bastante así que al final quedó una tarde/noche agradable. Mientras O. también tuvo su sesión de cine porque vio Toy Story en la tele mientras nosotros no estábamos.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

A quién no le gusta que le saquen fotos?


Primer paseo en bici en familia

El domingo aprovechando el buen tiempo y que era el "día sin coches" en Bruselas, fuimos a dar nuestro primer paseo en bici en familia.

Oihan aprendió a andar en bici de dos ruedas este invierno y este verano ha mejorado un montón echando carreras con sus amiguitos así que como a Oihan le encanta andar en bici por "la carretera grande" y aprovechando que el domingo no había coches, ahí nos fuimos.

O. se portó como un campeón. Hay que tener en cuenta que vivimos en una calle rodeada de cuestas y que al salir es muy fácil todo cuesta abajo, pero la vuelta es otra historia. Por la mañana O. volvió a casa un poco enfadado porque la cuesta para subir a casa le había costado demasiado y no había podido subirla, tuvo que pararse, intentar cambiar las marchas... Pero por la tarde lo hizo genial y papá sólo nos sacó unos minutitos de ventaja. Yo iba detrás del peque y he de confesar que a veces hasta me costaba seguir su ritmo, pero claro, no me iba a dejar ganar por mi hijo ;-) así que también hice un esfuerzo. Al final llegamos a casa después de haber recorrido unos 6 km. Creo que repetiremos la experiencia pronto.

La foto la saqué desde la bici así que está un poco movida. O., M. (el casco rosa) y papá.